No cabe la menor duda de que la celulitis es ¡nuestra peor pesadilla!
Esa grasa que se ancla justo por debajo de la piel formando los antiestéticos hoyuelos, (también conocidos como piel de naranja), nos trae por la calle de la amargura… Y ni siquiera saber que afecta a más del 95% de las mujeres consigue aliviarnos.
La celulitis tiene especial predilección por los muslos, glúteos y caderas aunque también puede instalarse en vientre, brazos…y, por cierto, no discrimina a ninguna mujer; delgadas, rellenitas, con sobrepeso, incluso famosas… todas pueden padecerla de igual manera.
Sus nódulos de grasa, al aumentar de tamaño, comprimen la circulación, aumentan la retención de líquidos en la zona e impiden la eliminación de toxinas. Todo ello empeora más, si cabe, el aspecto de la piel, que se vuelve “acolchada”, cetrina y flácida.
Los factores que predisponen a la celulitis son fundamentalmente hormonales (pubertad, síndrome premenstrual, menopausia…), genéticos (es más frecuente en la mujer mediterránea), circulatorios (una mala circulación venosa y linfática favorecen los edemas), alimentarios (grasas saturadas, azúcares, sal, alcohol…), sin olvidarnos del sedentarismo.
Queda claro que eliminar la celulitis es difícil, aunque sí se puede prevenir. ¿El secreto? Hacerlo desde todos los frentes y con constancia.
Es necesario un cambio de hábitos de vida. Más que una dieta baja en calorías, típica de quien busca adelgazar, lo importante es una dieta equilibrada, sana, con especial interés por las proteínas, verduras y frutas, productos integrales y grasas “buenas” como los Omegas. Imprescindible, también, beber abundante agua a lo largo del día para eliminar toxinas y evitar el estreñimiento.
En cuanto al deporte, está demostrado que los ejercicios para tonificar los músculos combaten la piel de naranja mejorando la circulación y la firmeza.
Sabemos que:
- No siempre hay que adelgazar para eliminar la celulitis. En caso de ser necesario perder peso recurriremos a una dieta equilibrada y sana para deshacernos de los kilos de más pero sin perder masa muscular para evitar la flaccidez.
- Para estimular la circulación, reducir grasa localizada y reafirmar glúteos y muslos es necesario realizar ejercicio físico específico
- La aplicación de productos anticelulíticos y/o adelgazantes debe ser constante para apreciar la mejoría, además, siempre mejor mañana y noche después de la ducha. Existen distintas texturas, así que elige la que más te conviene.
Otra ayuda fundamental a tener en cuenta es la de la Fitoterapia. La Fitoterapia pone a nuestra disposición todo tipo de plantas medicinales, para ayudarnos con la celulitis a todos los niveles:
- Plantas drenantes: Como el Ortosifón… favorecen la eliminación de líquidos y toxinas.
- Plantas para “quemar grasa”: Té verde o Camilina, Mate… estimulan el metabolismo de las grasas.
- Plantas venotónicas: Vid Roja, Cataño de Indias…mejoran la circulación.
Ya hemos visto lo difícil que es luchar contra la celulitis debido a todos los factores implicados en su aparición.
Pese a todo, ¿no consigues que desaparezcan los nódulos de grasa?
No tires la toalla, los últimos tratamientos médico-estéticos son otra ayuda más a sumar a las anteriores:
- Presoterapia: usa unas “botas” hasta los muslos que se van hinchando, estimulando la circulación de retorno y mejorando el drenaje.
- Mesoterapia: se infiltran vía subcutánea, mediante unas agujas, un cóctel de principios activos para activar la eliminación de toxinas y la combustión de la grasa.
- Endermología: efectúa un masaje profundo mediante unos rodillos que realizan una aspiración y tracción de la piel, consiguiendo así estimular la circulación y favorecer la eliminación de toxinas. Algunas máquinas combinan, además los Ultrasonidos para potenciar los efectos.
- Electroforesis: es similar a la Mesoterapia pero en lugar de usar agujas, los principios activos se infiltran mediante descargas eléctricas.
- Cavitación: las ondas de ultrasonidos, que se aplican mediante un rodillo especial, producen microburbujas de vacío que promueven la destrucción del adipocito desde el interior y la liberación de la grasa. Se usa para grasa muy localizada y suele acompañarse de presoterapia o masaje linfático manual para facilitar la eliminación de la grasa.
Articulos Relacionados: